Así funciona el semáforo nutricional

¿Alguna vez te has fijado en las etiquetas de los alimentos? ¿Te han llamado la atención el código de colores de algunas cajas? Este elemento de los envases es el conocido como semáforo nutricional y el objetivo es que comprendas de manera rápida y precisa el valor de los alimentos. Vamos a conocer algo más sobre este elemento.

Qué es el semáforo nutricional

El semáforo nutricional se creó por primera vez en Reino Unido. De nada servía conocer las cantidades de sal o azúcar de un producto si no se podía identificar como algo positivo o negativo. Para paliar este problema se implementó el código de colores que permite una rápida identificación de un solo vistazo.

Los semáforos nutricionales se suelen emplear en cada componente con el que cuenta el alimento. Es decir, se le da un color al azúcar, otro a la sal, grasas y resto de componentes para poder visualizarlos por separado. La cantidad de estos nutrientes se mide por la ración de consumo y se le añade el porcentaje que represente lo consumido con respecto al día completo.

Pero no todos los semáforos son iguales. Existen una gran variedad de ellos, en ocasiones diferentes marcas cuentan con uno distinto. Aunque todos ellos toman como base el desarrollo original de Reino Unido, el primer semáforo nutricional puesto en marcha.

¿Es Nutriscore lo mismo?

Nutriscore es uno de los semáforos más comunes en España. Diseñado por científicos independientes franceses,, cuenta con un código de colores más alto que el original y otorga un solo valor a los productos al combinar los diferentes nutrientes. El objetivo que persigue es ser más sencillo de interpretar y dar la información al consumidor de manera más rápida y efectiva.

Este sistema está pensado para lograr una compra más saludable y conseguir que la alimentación sea más sana. Para dar la puntuación final,, el algoritmo de Nutriscore incluye los elementos positivos (como la fibra) y los negativos para situar el producto en un determinado color.

El código de colores del semáforo

Los semáforos nutricionales tienen en común el código de colores. Por norma general, cuentan con entre tres y cinco colores diferentes que van desde el verde al rojo pasando por una gama de amarillos, naranjas y ámbar. Cada uno de los colores aporta una información única y diferenciada y puede influir en tu decisión de compra.

Rojo y ámbar

Esta gama de colores suele indicar que la cantidad de un nutriente es demasiado alta con respecto a la ingesta diaria recomendada. En los semáforos que se vislumbra por separado puedes comprobar si es el azúcar, la sal u otro elemento que te afecte de una manera especial. En el caso del Nutriscore, deberás fijarte en los ingredientes, ya que no sé específica el causante de ese color.

Amarillo

En estos casos es un elemento que está un poco por encima de la media y que deberás compensar a lo largo del día. Como ya hemos comentado en Nutriscore, el amarillo puede contener algún nutriente que por separado sería rojo, pero que la media lo rebaja.

Verde

Sin duda, estás eligiendo un buen producto, ya que sus elementos entran dentro de la ración diaria recomendada. Es la mejor valoración que puede obtener un alimento con independencia del semáforo elegido por el fabricante.

Los alimentos que evitan este etiquetado

Existen una serie de alimentos que están exentos del uso de los semáforos nutricionales. Los productos frescos, elementos con un solo ingrediente, cafés, infusiones, envases de menos de 25 cm cúbicos (como chocolatinas individuales o chucherías) o las bebidas alcohólicas no requieren de contar con esta información.

El semáforo nutricional es un elemento de etiquetado que puede servirte de guía para una alimentación más saludable.