Cómo cuidar la piel con mascarillas caseras de naranja

Hemos hablado en repetidas veces de los beneficios del consumo de la naranja, por sus numerosos beneficios que aporta al organismo. También nos hemos interesado por cómo cuidar nuestra salud facial de forma que retrasemos mejor el envejecimiento. Pero, ¿sabías que ambos conceptos puede convivir?

La naranja es una fuente de nutrientes con la que ahora tu piel también podrá verse beneficiada. Contiene gran cantidad de vitamina C, una vitamina de gran importancia para mantener la elasticidad
y la hidratación de la piel, debido a que participa en la síntesis del colágeno en nuestro organismo. La naranja aporta también calcio, cuyas funciones son muy importantes para la piel. Estamos
hablando de protección y renovación celular, así como de regulación del pH. Contiene un alto nivel de betacaroteno, el cual favorece la creación de vitamina A. Esta vitamina se relaciona directamente con la prevención del envejecimiento prematuro de la piel.

Cinco mascarillas caseras con todo el poder de la naranja

Por todo lo anterior, nos gustaría presentarte distintas formas de hacer tus propias mascarillas
faciales caseras y que, de este modo, disfrutes de todos los beneficios que las naranjas pueden
proveerte, ahora también en la piel. Ten en cuenta, además, que puedes utilizar estas mascarillas en
otras partes de tu cuerpo, como el cuello o las manos.

A continuación, te presentamos varias ideas de mascarillas faciales.

Mascarilla de cáscara de naranja, avena y yogur

Esta mascarilla destaca por eliminar impurezas e hidratar el rostro. Esto es debido a la presencia de
la naranja, pero también del yogur, ya que tanto su consumo como su uso tópico tiene beneficios
para la salud de la piel. A todo esto, hay que añadir la avena, que se caracteriza por reducir la
deshidratación de la piel al fortalecer la dermis. Esta mascarilla puede ser utilizada en cualquier tipo de pieles. En este sentido, lo ideal es que la apliques, al menos, dos veces por semana. De esta manera, conseguirás un cutis fresco e hidratado.

Ingredientes:
– Una naranja. Ten presente que para esta mascarilla utilizaremos solo la cáscara. Opcionalmente,
puedes añadir 10 ml (una cucharada) de zumo.
– 60 g (3 cucharadas) de yogur natural.
– 20 g (2 cucharadas) de harina de avena.

Preparación:
1. Lava tu rostro con jabón neutro y agua tibia.
2. Mezcla todos los ingredientes en una licuadora hasta que obtengas la densidad deseada, que será
como de crema. Si consideras que la mezcla está demasiado espesa, puedes añadir entonces la
cucharada de zumo de naranja.
3. Toma una brocha y aplica el producto resultante en el rostro.
4. Deja actuar la mascarilla durante unos minutos (entre 15 y 20).
5. Enjuaga tu cara con agua tibia o fría.

Mascarilla de cítricos con zanahoria y yogur

El gran beneficio de esta mascarilla radica en hacer la piel más radiante, dotándola de un mejor
aspecto. Esto es gracias a la naranja, pero también a los otros ingredientes: el limón es un gran
antioxidante y desinfectante de la piel, por lo que limpia y regenera de manera activa el cutis. Por otro
lado, los efectos de la zanahoria son reconocidos desde siempre, ya que funciona como un protector
solar, posee propiedades antiinflamatorias, ayuda a eliminar las manchas o las cicatrices de pequeño
tamaño y combate el envejecimiento prematuro de la piel.

Ingredientes:
– 10 ml (una cucharada) de zumo de naranja.
– 10 ml (una cucharada) de zumo de limón.
– 10 ml (una cucharada) de zumo de zanahoria.
– 20 g (una cucharada) de yogur natural.

Preparación:
1. Lava tu rostro con jabón neutro y agua tibia.
2. Mezcla el zumo de naranja, el de limón y el de zanahoria en una licuadora.
3. A continuación, añade el yogur y remuévelo todo hasta conseguir una pasta homogénea.
4. Toma una brocha y aplica el producto resultante en el rostro.
5. Deja actuar la mascarilla durante unos minutos (entre 15 y 20).
6. Enjuaga tu cara con agua tibia o fría.

Mascarilla de miel y naranja

La gran ventaja de esta mascarilla radica en lo beneficiosa que resulta para nutrir la piel, debido a las
propiedades antibacterianas de la miel. Por ello, combate las manchas o pequeñas rojeces, así como
ayuda contra infecciones como el acné. Además, acaba con las pieles muertas, limpia los poros
faciales y elimina la suciedad adherida.

Ingredientes:
– 50 g (dos cucharadas) de miel natural.
– 80 ml de zumo de naranja (equivale a una unidad aproximadamente).
– En algunas versiones, se puede utilizar 4 ml (una cucharada pequeña) de aceite de rosa de mosqueta
para dejar el rostro aún más suave.

Preparación:
1. Lava tu rostro con jabón neutro y agua tibia.
2. Mezcla el zumo de naranja con la miel.
3. Remuévelo hasta que se mezcle por completo.
4. Aplícalo con las manos sobre el rostro.
5. Deja actuar la mascarilla durante unos minutos (entre 15 y 20).
6. Enjuaga tu cara con agua tibia o fría.

Mascarilla de cáscara de naranja con sándalo

Si te gustan las mascarillas con olor, esta es la tuya, gracias al aroma del sándalo. Además, esta
mascarilla te será útil para el tratamiento del acné, los eccemas, la psoriasis y otras afecciones
similares.

Ingredientes:
– 5 g (una cucharada pequeña) de polvo de cáscara de naranja.
– 5 g (una cucharada pequeña) de sándalo en polvo.
– 10 ml (dos cucharadas pequeñas) de agua de rosas.

Preparación:
1. Deja secar la piel de una naranja, bien en una bolsa o bien en un recipiente. Cuando esté seca,
tritúrala para hacerla polvo. No obstante, también puedes comprar este producto en una
herboristería.
2. Mezcla el polvo de cáscara de naranja, el sándalo y el agua de rosas en un recipiente hasta que
quede una pasta uniforme.
3. Con la ayuda de una brocha, aplica el producto resultante en el rostro.
4. Deja actuar la mascarilla durante unos minutos (entre 15 y 20).
5. Enjuaga con agua tibia.

Mascarilla de naranja con aceite de coco

Si no conocías el aceite de coco, sabemos que te conquistará. Es un producto que aporta grandes
beneficios en la hidratación de la piel. Además, contiene vitamina E. Se trata de un poderoso
antioxidante que previene el envejecimiento prematuro de la piel. ¿Cómo? Sus proteínas contribuyen
a la salud celular al reparar los tejidos. En este caso, esta mascarilla te ayudará a prevenir el acné, así
como otras infecciones de piel. La gran ventaja de esta mascarilla es que podrás utilizarla también en
tu cuero cabelludo, ya que le proporciona hidratación, densidad y luminosidad a los cabellos
castigados.

Ingredientes:
– 250 ml de zumo de naranja (equivale a tres unidades aproximadamente).
– 40 g (dos cucharadas) de aceite de coco. Ten en cuenta que el aceite de coco se presenta en estado
sólido. Caliéntalo en un microondas unos segundos para hacerlo líquido.

Preparación:
1. Lava tu rostro con jabón neutro y agua tibia.
2. Mezcla el zumo de naranja con el aceite de coco y remuévelo hasta que se mezcle por completo.
3. Aplícalo sobre tu rostro. Si lo quieres aplicar sobre tu cabello, envuélvelo luego con una toalla vieja o
un gorro de ducha. Deja actuar la mascarilla durante unos minutos (entre 15 y 20) para la cara, o unas dos horas en el caso del cabello. Enjuaga tu cara con agua tibia o fría. Si lo has utilizado en el cabello, lávalo con los productos habituales.