Consejos para elaborar meriendas saludables y divertidas para los más pequeños de la casa
La merienda es también una comida importante para los niños. Lo malo es que muchas veces por falta de tiempo o en la mayoría de las ocasiones, de costumbre, acudimos a alimentos poco saludables para este momento del día, como es el caso de los batidos industriales.
Que los niños coman bien, de forma saludable y divertida con este tentempié es posible. ¿Cómo? Con un poco de creatividad y buenos alimentos. ¿No tienes ideas? Nosotros te damos unas cuantas opciones de meriendas saludables.
Motivos por los que es esencial una merienda saludable
La merienda supone el 15 % de las necesidades nutricionales de una dieta equilibrada, además de ayudar a mantener la energía entre comidas. Es por esto que es muy importante poner la máxima atención en ella para que tus hijos se mantengan sanos y con energía todo el día.
Para que una merienda sea nutritiva, tiene que formar parte de una dieta equilibrada. ¿Tu hijo no suele tomar fruta después de las principales comidas? Pues, aprovecha la merienda para prepararle un bol o unas brochetas con fruta fresca, por ejemplo. ¿Tu hijo no puede vivir sin los dulces? Elimina la bollería industrial y prepara algún dulce casero para la merienda.
¿Quieres ideas para meriendas divertidas, sanas y nutritivas para tu hijo? Toma estas ideas.
Consejos para preparar meriendas ricas, saludables y divertidas para los niños
Si quieres que la merienda de tu hijo sea rica, saludable y nutritiva, toma nota de estas ideas. ¡Vas a triunfar seguro!
1. Corta el pan de molde. Recuerda que sea un pan sin aditivos, grasas ni azúcares, con moldes divertidos. Les resultará mucho más atractivo. El pan de cereales o el pan integral pueden ser muy buenas opciones.
2. Elige vasos atractivos para preparar tus batidos saludables, boles con dibujitos y platos coloridos. Termina tus batidos con una bonita pajita y un trocito de fruta colocada sobre el borde del vaso.
3. Pon especial atención a la hora de elegir el pan. Escógelo lo más sano posible, sin aditivos, y de cereales o integral. Elige panes con formas que resulten atractivas para los niños.
4. Haz tus propios patés. Los patés industriales tienen muchas grasas, azúcares y aditivos. El hummus, un paté de tomates secos o uno de aguacate machacado con un poquito de aceite de oliva son algunas buenas ideas.
5. Dulces saludables. Si a tu hijo le gustan los dulces, olvídate de los industriales, son realmente malos para la salud. Apuesta por hacerlos caseros con aceite de oliva virgen extra y un mínimo de azúcar o miel. Entre las mejores propuestas están el arroz con leche, las magdalenas y el bizcocho.
6. Haz tus mermeladas y compotas. Si a tu hijo le encantan las mermeladas, apuesta por las caseras con menos azúcar y sin aditivos. Son muy fáciles de preparar.
7. Haz platos divertidos. Con un poquito de imaginación, puedes hacer dibujitos sobre un plato con la comida de la merienda. Por ejemplo, puedes hacer un gusano con un plátano poniéndole unos ojitos y unas patitas de chocolate negro, etc. Esta idea funciona muy bien con los más pequeños.
8. No dejes atrás los huevos. Los huevos también pueden forma parte de una merienda sana y nutritiva. ¿Por qué no lo pones en una sartén sobre un bonito molde? ¿Y si se lo das cocido con un chorrito de aceite de oliva y formando un bonito animalito?
9. Trata de usar el azúcar al mínimo. Sustituye el azúcar por otras opciones más saludables como la miel o un poco de zumo de alguna fruta especialmente dulce.
Recetas sencillas para las meriendas
¿Quieres unas recetas muy saludables y rápidas de hacer para las meriendas de tus niños? Estas son algunas ideas.
Bocadillos saludables
Ideas de bocadillos saludables hay cientos. Lo importante es que evites los embutidos, las mantequillas y los patés con mucha grasa. Apuesta por quesos bajos en calorías y el queso tipo Burgos, el aceite de oliva y alguna hortaliza como el tomate, el aguacate o la lechuga.
También puedes hacer bocadillos con pescados en lata y alguna verdura. De atún con tomate o de sardinas, melva o caballa con unas hojas de lechuga.
Y otra propuesta bastante interesante son los bocadillos de tortilla francesa. Además, le puedes añadir otros ingredientes como atún en lata, perejil, queso rallado o semillas variadas.
Helados de frutas o cacao
Los helados de frutas son ideales para las meriendas de verano y para cuando hace mucho calor. Entre las propuestas que te ofrecemos: de leche y plátano, de zumo de naranja y trozos de kiwi y sandía, de leche con cacao. Recuerda ponerlos en bonitos moldes para polos.
Batidos de frutas, cereales y frutos secos
Este tipo de batidos son riquísimos y son de lo más nutritivos. Quedan muy bien de fresas y plátano, plátano y frutos secos o de aguacate, azúcar moreno y canela. Si quieres endulzarlos, ponles solo un poquito de miel.
Brochetas de frutas con hilo de chocolate negro
Las brochetas de frutas por su color y resultan de lo más atractivas para los peques. Algunas combinaciones muy resultonas son: piña, plátano y fresa, melón, kiwi, sandía y melón… Para que les resulten más llamativas puedes derretir un poquito de chocolate negro con un alto porcentaje de cacao en el microondas y ponerlo sobre las brochetas a modo de hilos.
Arroz con leche
Es posible que no tengas la costumbre de prepararle arroz con leche para merendar porque se lleva mucho tiempo. Pero tienes una alternativa que solo te llevará unos minutos y que está igual de buena. Prepáralo en una olla exprés. Para que resulte más saludable hazlo con leche semidesnatada, sin mantequilla con un y poco azúcar.
Crepes rellenos
Para estos crepes, no necesitas más que una tacita de harina, media de azúcar, una de leche y un huevo. Bate muy bien y derrite un poquito de mantequilla de calidad en la sartén y haz tus crepes. Puedes rellenarlos con un poquito de miel, queso rallado, guacamole…
Paté de tomate seco para bocadillos
Este es un paté muy sabroso que sabe a chorizo y que a los niños les puede encantar. Bate unos tomates secos previamente rehidratados las 24 horas anteriores, unas almendras, orégano, pimentón dulce, aceite de oliva virgen extra, medio ajo y sal. Úntalo sobre un buen pan de cereales y listo.
Yogur con cereales y fruta
Esta es una opción muy fácil y rápida de preparar y con un resultado muy atractivo para los niños. Pon en el fondo un poco de mermelada o compota casera, encima yogur blanco batido con un poquito de miel y encima unas frutas como las fresas o las moras, unos frutos secos o cereales.
Compota casera
Para preparar compota casera no tienes más que poner una manzana y un membrillo pelado y cortado en trozos en un cazo con un poquito de agua, azúcar, un tubito de canela y un par de clavos de olor. Déjalos cocer hasta que las frutas estén tiernas y el azúcar se haya convertido en almíbar. Puedes acompañarla con un poquito de yogur blanco.
Con estos trucos seguro que consigues que la merienda sea su momento preferido. Si quieres descubrir alguna receta más para tus meriendas entra en las Creaciones de Casa Bruñó y atrévete a probar cosas nuevas.