Melón, un gran aliado para tu piel este verano

¿Te gusta el melón? Sin duda, es una de las opciones más recomendables para el verano. De hecho, debe formar parte de una alimentación saludable; es nutritivo, hidrata y aporta vitaminas y minerales esenciales. Sin embargo, ¿sabías que también te ayuda a cuidar la piel? Te contamos todo lo que necesitas saber a continuación.

Melón, lo que tu piel necesita este verano para estar radiante

Solo es necesario repasar los múltiples beneficios de su consumo para entender que no debe faltar en tu dieta.

  • Difumina las manchas. La exposición a los rayos uva y UVB, a la luz azul de los dispositivos electrónicos y a la polución genera alteraciones y marcas en tu piel.  La vitamina C (antioxidante), la vitamina A y los beta-carotenos que contiene ayudan a igualar la pigmentación de tu piel fácilmente.
  • Hidrata todas las capas de tu piel. El 80 % de su contenido es agua. Si tienes problemas de hidratación, comer melón te ayudará a lucir una piel más tersa y menos reseca.
  • La importancia de la vitamina E. Ayuda a prevenir la aparición de las arrugas y de las líneas de expresión. Estimula la regeneración celular, por lo que tu piel lucirá más tersa, suave y elástica.
  • Es eficaz para combatir el acné. Contribuye a reducir las marcas, pero también evita su reaparición. Su poder para limpiar y desintoxicar la piel contribuye, directamente, a quitarle algunos años a tu imagen.

Puedes tomar melón a media mañana, en la merienda o como postre. Notarás sus efectos poco a poco y no tardarás en ir comprobando cómo el estado de tu piel mejora mucho y casi sin darte cuenta.

Cosmética casera con melón

Por si lo anterior no fuera suficiente, te proponemos el uso tópico del melón para aprovechar todas sus características. De hecho, los tratamientos de cosmética casera con melón que te proponemos te ayudarán a:

  • Hidratar el cutis de forma eficaz.
  • Suavizar tu piel, logrando que al tacto no presente zonas resecas o rugosas.
  • Aumentar la elasticidad y la firmeza.

Te recomendamos que tomes nota de las siguientes alternativas, pero recuerda que no has de limitarte a tu rostro. Aplícatelas también en la zona del cuello y en el escote para conseguir los efectos deseados. ¿Te atreves a cambiar de imagen?

Aftersun de melón

Acabas de volver de la playa o de la piscina, te duchas y te dispones a comer o a relajarte. Es bastante habitual que se te olvide que tu piel necesita de cuidados especiales para recuperarse de su exposición directa al sol. Para ello, puedes hacer una mascarilla que te ayude a hidratarla y a frenar la aparición de posibles arrugas. Lo único que tienes que hacer es:

  • Cortar una tajada de melón y dejarla a temperatura ambiente durante unos minutos.
  • Retira la cáscara y machaca la pulpa con un tenedor.
  • Colócatela en la cara y en el cuello durante 15 minutos.
  • Dúchate para eliminar los restos.

Mascarilla de melón aclarante

Indicábamos, anteriormente, que el melón ayuda a unificar el color de tu piel. Si has notado que tienes algunas manchas o que tu piel no tiene el mismo tono, esta mascarilla te ayudará a obtener un fantástico resultado:

  • Tienes dos opciones, o usar una cucharada de jugo de melón o un trozo de la cáscara por la parte de la pulpa. Debes frotar la opción elegida muy suavemente por toda la piel del rostro, del cuello y de tu escote. Recuerda cubrir la máxima superficie posible.
  • Debes dejar secar el jugo. Notarás que tu piel se pone más tirante poco a poco. Cuando dejes de tener esa sensación aguanta cinco minutos.
  • Retira la mascarilla usando agua tibia. Debes hacerlo con suavidad y sin frotar tu piel. Si quieres, usa una esponja suave.
  • Seca tu piel con ligeros golpecitos para estimular la circulación.

Si te haces la mascarilla por la noche, aplica algún aceite natural para hidratarla. Si lo haces por la mañana, aplícate un protector solar antes de salir a la calle. Debes preparar esta mascarilla entre una y dos veces por semana. Hazlo durante un mes o un mes y medio para comenzar a comprobar cómo tu piel luce radiante y bien iluminada.

Mascarilla de melón para fortalecer la piel

Aunque no tengas manchas en la piel y tampoco te expongas al sol de forma directa, el paso del tiempo es inexorable. Poco a poco, tu organismo va produciendo menos colágeno y van apareciendo líneas de expresión, arrugas y otros síntomas similares. Esta mascarilla es ideal para cualquier persona que quiera comenzar a frenar el lógico deterioro de su piel:

  • Comienza troceando el melón para licuarlo. Puedes usar una licuadora o una batidora. Debe quedarte una pasta gelatinosa a la que añadirás el zumo de un limón. Remueve bien con un tenedor hasta lograr una pasta manejable que puedas usar con facilidad.
  • Aplícate la mascarilla en las zonas más deterioradas. Es esencial que tras hacerlo no te dé la luz del sol, ya que podría provocar una reacción adversa en combinación con el limón y generar manchas. Mejor si preparas esta mascarilla por la noche.
  • Deja que actúe la mascarilla durante media hora. Túmbate y ponte algo de música para relajarte. ¡Dedícate esos minutos!
  • Enjuaga muy bien con agua fría. Sécate la piel suavemente y usa crema hidratante.

Debes repetir el proceso al menos dos veces a la semana durante un mes. Si quieres que sus efectos sean más potentes, deja el melón en el frigorífico al menos un día. Cuanto más frío esté, mejores resultados obtendrás.

Mascarilla de melón, manzana, avena y miel para evitar la flacidez

Otra alternativa es la que combina el melón con otros ingredientes que aumentan su poder regenerador.

  • Ingredientes: tres trozos de melón de tamaño mediano, media manzana, miel (una cucharada) y avena (dos cucharadas).
  • Comienza batiendo la manzana y el melón. Tu objetivo es conseguir una pasta de cierta densidad. Cuando la obtengas, añade la avena y la miel. Debes mezclar muy bien todos los ingredientes y lograr un espesor similar al de una crema hidratante.
  • Reparte la mascarilla por la piel del escote, el cuello y la cara. Debes esperar media hora para que te haga efecto. Si quieres, puedes usar una brocha de silicona para expandir la mascarilla y luego masajear con tus dedos.
  • Retira con agua fría y sécate bien la piel. Puedes aplicarte una crema hidratante para finalizar el proceso.

Deberías aplicarte esta mascarilla tres veces a la semana para comenzar a observar cómo van desapareciendo las patas de gallo, las arrugas de la frente y las líneas de expresión que rodean tu boca.

Una alternativa perfecta para todo tipo de piel

Como has comprobado, no necesitas ningún ingrediente especial y el coste de las mascarillas es más que asequible. Te animamos a que conviertas al melón en tu mejor secreto de belleza. Descubre todos los trucos y recetas con la mejor fruta que te ofrecemos cada semana en Casa Bruñó y suscríbete para no perderte nada.