¿Por qué es beneficioso comer naranjas antes y después de hacer ejercicio?

¿Quién no ha oído en casa cómo las naranjas ayudan a prevenir los resfriados del invierno? ¿Quién no ha escuchado más de una vez que hay que beberse el zumo para tener el sistema inmunológico a tope? Suponemos que nadie ha escapado a los superpoderes de este cítrico desde pequeños, pero ¿cuánto sabemos de la importancia de comer naranjas antes y después de la práctica de un deporte?

Si eres de los que no saben más allá de la lógica necesidad de consumir vitaminas y minerales durante la práctica de un ejercicio, este es el sitio adecuado. Te contamos no solo eso, sino por qué deberías comer naranjas antes y después de la práctica de cualquier deporte.

Disfruta de las naranjas después de hacer ejercicio para hidratarte

En términos generales, si eres deportista, debes saber que en tu caso existen una serie de nutrientes que son más necesarios que otros. Una persona sedentaria no necesita los mismos aportes que un deportista. Dicho esto, un plan de entrenamiento o el ejercicio físico requiere de una alimentación determinada para conseguir aumentar el rendimiento.

Para sacar partido a ese ejercicio, es importante saber que el cuerpo requiere de una serie de nutrientes que transformar en energía. Es decir: tu cuerpo necesita combustible encargado de generar energía en los músculos. Ese combustible son las vitaminas. También, los minerales. Así y de una forma esquemática, el cuerpo requiere para quemar energía haciendo funcionar sus músculos consumir esas vitaminas y esos minerales. Este aspecto hace que por lógica podamos afirmar que para un rendimiento adecuado es necesario contar con unos niveles vitamínicos y de minerales.

¿Qué pasa cuando ya hemos quemado o usado esos nutrientes? Pues, lógicamente, nuestro cuerpo necesitará reponer las reservas. Es importante que sepas que la vitamina no se acumula ni se conserva. Es por este motivo por el que comer una naranja antes de hacer ejercicio es aconsejable. Dará a tu cuerpo una dosis de vitamina C, entre otros nutrientes, que te vendrá muy bien a modo de combustible.

Una vez hecho el ejercicio, esta dosis se habrá quemado. También estaremos bajos de minerales que habremos expulsado a través de la piel en forma de sudor. Dos aspectos que hacen no aconsejable, sino necesaria, la reposición de ambos nutrientes para que nuestro organismo se equilibre y se rehidrate.

Zumo de naranja, una de las principales bebidas isotónicas

Es común el consumo de bebidas isotónicas después de la práctica de ejercicios. En muchas ocasiones puede más la publicidad de las marcas que las calorías o los azúcares que contienen la mayoría de estas bebidas que, si bien rehidratan, también cuentan con esos excesos que son contraindicados en general. Quizás por desconocimiento se opta por estas bebidas que se compran en cualquier establecimiento, porque un simple zumo de naranja es más efectivo. Un zumo de naranja reintegra los nutrientes perdidos, siendo una bebida natural, sin edulcorantes añadidos ni colorantes.

Reponer los electrolitos con una receta casera

Una de las cosas que sucede cuando haces deporte es que se pierden los conocidos como electrolitos, que son un conjunto de minerales importantes para el equilibrio de nuestro organismo. Será esta pérdida la que explique la importancia de las bebidas isotónicas, especialmente cuando hay un alto rendimiento o cuando se hace deporte por más de una hora.

La pérdida de agua y de electrolitos puede ser muy nociva para la salud y es lo que explica el aumento de la sed o la deshidratación, si no se bebe alguna bebida adecuada. Una composición que sea capaz de reponer la pérdida de manera inmediata y adecuada en proporciones.

Si eres deportista, debes saber que para hacerte una bebida isotónica casera solo necesitas un par de naranjas, agua y una cucharada de bicarbonato. El agua por sí sola no reintegra los minerales perdidos, porque debes tener en cuenta que cuando sudas no pierdes solo agua. La gran pérdida tiene que ver con esos minares que están detrás de las deshidrataciones y de los calambres. Por lo tanto, serán las vitaminas del zumo y el bicarbonato los encargados de esa reposición tan necesaria.

Comer naranja antes de hacer deporte para ganar energía 

Aunque no ha sido hasta hace mucho tiempo que los nutricionistas se han puesto de acuerdo en poner fin a la discusión acerca del beneficio de la fruta antes o después, ahora no hay duda: es beneficiosa en ambos momentos. Antes por el aporte de glucosa, por ejemplo, y después por la función hidratante de estas.

En el caso de la naranja, no es solo en el contenido de vitaminas donde reside su atractivo. Será su glucosa la encargada de hacer que sea bueno consumir una naranja antes de entrenar. Esta glucosa será metabolizada hasta convertirse en una excelente fuente de energía para deportistas.

La naranja y su índice glucémico

En el caso de la naranja, no hay discusión acerca de su idoneidad antes de hacer ejercicio. Tienes que saber que las dudas tienen que ver con los índices glucémicos de las frutas. No todas las variedades contienen las mismas proporciones o ese índice que, en realidad, es el valor que calcula o establece el tiempo que esa glucosa permanece en sangre. Así, no todas las frutas aportan la misma cantidad de glucosa y, por lo tanto, la presencia del azúcar en sangre tampoco es similar en todos los casos.

Esto explica por qué si vas a comer una fruta antes de hacer deporte puedes y, de hecho, es aconsejable siempre y cuando veas qué tipo de rendimiento vas a pretender o cuánto tiempo de ejercicio vas a practicar. Cuanto más tiempo de deporte vayas a hacer, más alto tiene que ser el índice de glucosa de la fruta que vayas a ingerir. En cualquier caso, una naranja antes de hacer deporte te aportará la glucosa suficiente para aumentar el rendimiento.

Una naranja en medio de un deporte donde hay descanso es otra alternativa para los tipos deportivos de larga duración, como puede ser un partido de tenis o un partido de fútbol. De hecho, no es de extrañar que sea la fruta elegida en los almuerzos de los deportistas. Esta es la razón.

Las frutas en general y las naranjas en particular son las mejores aliadas para los deportistas cuando ya han sufrido desgaste, pero también antes de padecerlo. La razón, en resumen, es su contenido en glucosa, minerales y vitaminas. Tres nutrientes que no solo ayudan con la energía o con la rehidratación, sino también a la hora de prevenir lesiones y calambres.

Como conclusión, tenemos que afirmar que las naranjas son un estupendo aliado para los deportistas. No solo por su aporte de vitaminas, sino por ser estas el mejor combustible para convertir en energía. También, porque son el elemento indispensable para la rehidratación de nuestro cuerpo tras una pérdida de agua y de electrolitos.

Dos naranjas son suficientes para hacerte una bebida isotónica o incluso al natural. Es la mejor aliada para quienes practican deporte y no quieren ingerir bebidas que son beneficiosas, pero altas en calorías y azúcares. ¡Síguenos cada semana en Casa Bruñó!